Este mes, en muchas de las principales ciudades de Estados Unidos, la gente ha salido a la calle para protestar contra las redadas del ‘ICE’ (Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de EE.UU.), que está deteniendo a personas que pueden (o no) ser indocumentadas. Especialmente en Los Ángeles, California, las manifestaciones, en su mayoría pacíficas, han sido recibidas no sólo por la policía local, sino también por la Guardia Nacional y las personas marines en servicio activo desplegadas por el presidente estadounidense. Ahora, las personas afectadas por la política de inmigración estadounidense y quienes protestan contra esas políticas están en peligro. Por favor, únase a esta oración por la gente en las calles, por las personas que temen al ‘ICE’ y por las personas funcionarias del gobierno que podrían encontrar un camino diferente:
Oh, Dios de cautives y libres, Tú nos has llamado a caminar con las personas exiliadas y las llamadas prójimos. Son nuestras amistades y nuestra familia, y nos sentimos impotentes para mantenerlas a salvo.
Hay quienes salen a la calle con ira justificada, Portando pancartas, no armas, Clamando por la dignidad de todes.
Por las personas detenidas en silencio, Por las familias destrozadas por la separación forzosa, por cada persona que el sistema trata de borrar, Recordémoslas ahora.
Que las personas que tienen poder no se muevan por presiones, Sino por conciencia. Que las personas que legislan lo hagan con amor. Que las personas que protestan estén seguras, y sean fuertes, y sean vistas.
Hazte presente en nuestras calles. Sé fuerte en nuestros lamentos. Acércate a quienes sienten desesperanza. Hasta que la justicia ruede como el agua, Oremos, tengamos esperanza. Amén
