El número de personas migrantes que entran diariamente en Estados Unidos para solicitar asilo ha aumentado tan rápidamente en los últimos seis meses que la Patrulla Fronteriza, el Servicio de Aduanas y el sistema judicial y de detención de personas inmigrantes están desbordados. El puerto de entrada de Lukeville (Arizona) se ha cerrado y el personal de ese puerto está ayudando ahora a la Patrulla Fronteriza a hacer frente al creciente número de personas que cruzan la frontera. Las personas solicitantes de asilo podrían ser devueltas a México, pero lo más probable es que las que no son de México reciban una cita en el tribunal y sean liberadas en los EE.UU. para esperar su audiencia. Sin embargo, dado que los sistemas están tan desbordados con el gran número de personas, la Patrulla Fronteriza ahora simplemente está liberando a cientos de personas migrantes en las calles de las ciudades fronterizas, especialmente en Texas y Arizona.
Desde septiembre, cientos de personas de todo el mundo han sido transportadas diariamente a la pequeña ciudad de Douglas, Arizona, (población de 17,000 habitantes) y dejadas a merced de la comunidad local. Sin embargo, sin mucha elección en el asunto, el gobierno y las personas en el liderazgo religioso de Douglas han acogido a estas personas recién llegadas y les han ayudado en el siguiente paso de su travesía hacia sus patrocinadores estadounidenses. Las personas habitantes de Douglas han respondido con amor y hospitalidad. El salón parroquial de la iglesia católica local se ha convertido en un refugio donde las personas recién llegadas pueden comer algo, recibir información y, posiblemente, pasar la noche. Todos los días llega un autobús del estado de Arizona para llevar a la gente a Tucson. Pero a menudo hay más gente que plazas en el autobús, y ahora los grupos locales también ayudan con el transporte.
Con la llegada de un número cada vez mayor de personas, los recursos de Douglas son cada vez más escasos. ¿De dónde saldrá el almuerzo de mañana? ¿Quién puede atender el albergue este fin de semana? ¿Quién proporcionará dinero para la gasolina del autobús local? Pero al igual que las personas que cruzan la frontera demuestran su valor y resistencia cada día, también lo hacen las personas habitantes de Douglas. Muchas han ofrecido lo que han podido, y siempre parece ser suficiente para el día.
- Oremos por todas las personas que viajan y ponen sus vidas en manos de personas extrañas a lo largo del camino.
- Oremos por la Patrulla Fronteriza y por el Servicio de Aduanas de Estados Unidos, que se encuentran con un número cada vez mayor de personas en el desierto de Arizona y Texas.
- Demos gracias por las personas funcionarias locales y por las numerosas personas voluntarias que ayudan a las personas migrantes que llegan diariamente a Douglas y a otras ciudades fronterizas de Arizona y Texas.
- Oremos para que las personas funcionarias del gobierno estadounidense superen sus diferencias y que puedan encontrar soluciones que sean humanas y justas.
- Oremos para que las personas en Estados Unidos que realmente tienen miedo y se sienten amenazadas por las personas migrantes vean ablandados sus corazones y sus mentes.