Después de casi un año de trabajo continuo, fui a Bogotá a visitar a mi familia, cuando estaba en el transmilenio, se subió un hombre mayor que caminaba con muletas, según lo que compartio, había sufrido una caída en su trabajo, el resultado fue una fractura en ambas piernas, quedando discapacitado de por vida.
Nos compartió que fue despedido y que la empresa no asume ninguna responsabilidad por el accidente, él dijo “fue mi culpa, yo no debí aceptar un trabajo sin contrato, pero necesitaba darle de comer a mi familia”. En ese momento solo sentí ira y mucha frustración.
No puedo dejar de pensar que como él, hay miles de personas que recorren las calles con sus cuerpos fracturados, buscando el pan para sus familias.
Estoy enojado, profundamente frustrado y escribo esta oración con la esperanza de que cuando alguien la lea una sus oraciones a las mías.
El Dios de los pobres
I
Se repite la historia compañeros y compañeras
Ahora las empresas han hecho del trabajo una ilegalidad
Han tercerizado el trabajo, para ahorrarse algunas monedas,
Como si toda la riqueza que ya tienen no fuera suficiente,
Que continúan construyendo sus fortunas sobre los cuerpos de nuestrxs hermanos y hermanas
II
Los asesinos de siempre, ahora son llamados directores,
Asesinos que se juntan con otros tan asesinos como ellos,
Han convertido el derechos a resistir en un crimen,
Matan a los líderes defensores y defensoras,
Y cuando el peligro ha pasado les rinden tributo,
y se dan golpes de pecho en frente de todos,
Como si Dios no llevara la cuenta de todos sus crímenes,
III
Hipócritas, con una mano saludan a los tiranos y con la otra golpean a los pobres,
Les dan trabajos a los pobres como si les estuvieran dando una limosna,
Y cuando se enferman se lavan las manos como si no fuera su problema,
IV
Se creen los dueños del mundo, se creen los dueños de las vidas,
Juegan con ellas y después las tiran como si fueran basura,
Cuando alguien se levanta en contra de sus acciones injustas
Lo silencian y se aseguran que su voz no sea escuchada
Compran a todo el que pueda hablar, lo compran con dinero sucio
Dinero que antes le han quitado a los pobres
V
Asesinos, tienen más crímenes sobre sus hombros que dinero en sus bancos
Asesinan a los hijos de Dios y luego salen en televisión, mintiendo
Como si con sus mentiras estuvieran convenciendo a alguien mas que a ustedes mismos,
Dan limosna para asegurarse de que van a ser perdonados por los asesinatos que han
cometido, pero Dios no olvida
VI
No se engañen, Dios no olvida los gritos de justicia de los pobres,
no olvida los gritos de los trabajadores que han muerto detrás de sus paredes,
no olvida las súplicas de los que han enfermado gracias a sus procesos industriales
Dios no olvida los gritos de hambre de las familias a las que ustedes han desamparado con sus despidos,
Dios no olvida los gritos de las familias que lloran a los asesinados por ustedes,
Dios no olvida y nunca olvidará esas voces que ustedes han silenciado,
Dios no olvida el grito de justicia que sale de la tierra,
VII
Esta tierra ha sido explotada históricamente por los mismos,
Esos mismos han desangrado la tierra y han desangrado a sus trabajadores,
Han mezclado la sangre con el petróleo acosta de los hijos e hijas de Dios
Han asesinado la tierra ignorando la voluntad de vida de Dios,
VIII
¿Quién responde por los animales asesinados por los derrames de petróleo
¿Quién responde por la tragedia y la crisis medioambiental?
¿Quién responde por esas familias que ya no tienen trabajo?
¿Quién responde por el asesinato de la tierra?
¿Quién es el responsable?
¿Quién le hace justicia a la tierra?
¿Quién le hace justicia a los empobrecidos?
IX
Nosotros conocemos a esos hipócritas que dicen y no hacen,
Conocemos a los asesinos de la tierra,
Conocemos a los asesinos de los trabajadores,
Conocemos sus rostros y conocemos sus estrategias,
Conocemos sus alianzas y a quienes les pagan para que se callen la boca,
Conocemos como las instituciones se han prostituido a los poderosos,
Sabemos dónde duermen y donde planean los asesinatos de los inocentes,
Sabemos a quienes protegen y cuales son los métodos que usan para cubrirse entre ustedes.
X
Quiero decirles una última cosa
En el nombre de el Dios de los pobres les digo,
Que de los muros en los que se protegen no quedará piedra sobre piedra,
y esas riquezas a las que tanto idolatran, Dios se las arrebatara,
Escóndanse en las cuevas porque El dios de los pobres va a venir por ustedes y los dejará en
cueros como ustedes hicieron con todos sus trabajadores, con nuestros hermanos.
Arrepientanse de sus pecados porque no hay pecado más grande que asesinar a un pobre y enriquecerse con su muerte.