Oramos por la justicia en las calles de Toronto

Facebook
Twitter
Email
WhatsApp
Print
Photo courtesy of Ava Whelpley of the Eye-Opener.

Octubre ha sido un mes difícil para la Red de Solidaridad en Isla Tortuga. Observamos desde lejos cómo nuestro colaborador Mskwaasin Agnew, un trabajador indígena (Cree y Dene) dedicado a la reducción de daños que vive en Toronto, navegaba hacia Gaza en el ‘Conscience’  con la ‘Freedom Flotilla’ (Flotilla de la Libertad). El 7 de octubre, el ejército israelí interceptó el barco en aguas internacionales y detuvo a todas las personas que iban a bordo, violando el derecho internacional.

Durante las 30 horas que Agnew estuvo detenida, la policía de Toronto arrestó a 17 personas que se manifestaban por su liberación y por el fin del genocidio. Ocho personas fueron arrestadas durante una sentada en la oficina del diputado local de Agnew, Karim Bardeesy, en la que le pedían que incidiera por su liberación y por sanciones contra Israel. Nueve personas fueron detenidas en una manifestación en el centro de la ciudad en la que la madre de Agnew habló del valor de su hija y de su solidaridad con el pueblo de Gaza. Rawan Nabil, una organizadora comunitaria palestina del Movimiento Juvenil Palestino, animó a las personas allí reunidas a “elevar la demanda de romper el asedio a Gaza, de un embargo de armas recíproco y de poner fin a este genocidio”. A su regreso a Toronto, Agnew dijo a sus amistades que se habían reunido para darle la bienvenida: “Sigue habiendo un genocidio en Palestina y mis compañeres siguen en prisión. Tenemos que pedir a Canadá que sancione a Israel”.

Nuestro alivio ante el anuncio del alto el fuego duró poco, ya que casi inmediatamente nos llegó la noticia de que Israel bloqueaba la entrada de ayuda humanitaria a Gaza y amenazaba con nuevos ataques.

Luego, el 16 de octubre, las personas integrantes de la RSIT observaron cómo las personas trabajadoras municipales desalojaban a las personas sin hogar que acampaban en el patio de la iglesia de ‘St. Stephen-in-the-Fields’, donde se encuentra la oficina de ECAP en Canadá. Durante los últimos cinco años, la ciudad de Toronto ha desalojado repetidamente a las personas sin hogar y sus pertenencias del lugar, a pesar de las objeciones de la iglesia. La iglesia solo se enteró el día anterior de que, en esta ocasión, el Ayuntamiento tenía la intención de hacer permanente el desalojo, vallando el patio y esparciendo enormes bloques de hormigón por el cerco para impedir que nadie montara tiendas de campaña. Irónicamente, el desalojo tuvo lugar el día después de que la reverenda Maggie Helwig recibiera el Premio Literario de Toronto 2025 por su libro ‘Encampment’ (Campamento), una memoria sobre las personas y las experiencias del campamento. Algunas de las 12 personas desalojadas aceptaron plazas en el abarrotado y a menudo inseguro sistema de refugios de la ciudad. Otras simplemente comenzaron a buscar otro lugar para acampar a poca distancia de la iglesia y del centro comunitario de ‘The Neighbourhood Group’ (El Grupo del Vecindario), del que dependen para recibir apoyo.

Les invitamos a que oremos por la transformación de los sistemas públicos que causan tanto sufrimiento.

Que nuestro sistema de “justicia” deje de criminalizar a las personas por actos de supervivencia y por acciones políticas no violentas.

Que defendamos políticas basadas en los derechos humanos y no en los intereses de quienes tienen el poder.

Que actuemos con sabiduría y valentía para desmantelar los sistemas coloniales y construir coaliciones de solidaridad global.

Que pronto veamos el fin del genocidio y el comienzo de la sanación y de la reparación.

Read More Prayers

Migrants waiting outside a community centre

Mensajeros de esperanza

Esta semana, en Agua Prieta, Sonora, México; en Douglas, Arizona, Estados Unidos, y alrededor del mundo, las personas migrantes y las comunidades solidarias con ellas

Ir al contenido