
El Título 42 continúa expulsando migrantes en la frontera entre Estados Unidos y México
Sigue vigente una ley draconiana de la era Trump, lo que pone a los y las migrantes en un peligro aún mayor

Sigue vigente una ley draconiana de la era Trump, lo que pone a los y las migrantes en un peligro aún mayor

Las políticas migratorias de Estados Unidos son cada vez más violentas, centrándose en el refuerzo fronterizo y la reforma migratoria pero no abordan las muertes de migrantes. Reconocemos y recordamos a aquellos y aquellas migrantes que mueren solos y solas en el desierto y rezamos por la reconciliación en nuestras fronteras.

Oremos para que las personas migrantes estén protegidas de la Patrulla Fronteriza y también de los cárteles mexicanos.

Lamentemos que aún hay personas esperando solicitar asilo.

Oremos por mujeres fuertes en todas partes que están encontrando formas creativas de apoyar a sus familias

Oremos por la seguridad y, por la salud física y emocional de todas las personas que cruzan la puerta del CRM.

Oremos para que un día, en el futuro cercano, la frontera se vuelva a abrir y las personas puedan solicitar asilo nuevamente y ya no vivan en peligro.

Oremos para que las personas funcionarias detengan permanentemente la construcción y que “no se construya ni un pie más” del muro.

Agradezcamos a las personas voluntarias que trabajan muchas horas todos los días para brindar alimentos, primeros auxilios y apoyo emocional a las personas migrantes.

La disciplina espiritual de llamar los nombres de las personas que han fallecido, es una forma en la que se mantiene la esperanza mientras se vive y trabaja en la frontera entre Estados Unidos y México.