Los colonos atacan a les niñes, al asaltar un jardín de infantes en Hebrón

Las familias del vecindario de ‘Jabal Jalis’, en Hebrón, sufren cada vez más abusos por parte de los colonos y de las personas soldado israelíes, lo que hace imposible realizar las tareas cotidianas básicas.
Facebook
Twitter
Email
WhatsApp
Print
an empty playground at the kitdergarten where settlers raided and attacked children

La violencia va de la mano de la apropiación de tierras en ‘Jabal Jalis’, un vecindario de Al Jalil/Hebrón. A principios de este mes, se nos recordó la dura realidad de tener una casa rodeada de asentamientos invasores, y cómo los colonos aumentan su peligrosidad cuando tratan activamente de expulsarte de tu tierra.

Desde la llegada de los colonos a la zona, la comunidad local de ‘Jabal Jalis’ se ha enfrentado a una escalada de intimidación, y las tensiones se han intensificado considerablemente desde el 7 de octubre. En un incidente especialmente alarmante, los colonos arrojaron piedras a les niñes del jardín de infantes, una afirmación que (audazmente) justificaron acusando a les niñes de iniciar el enfrentamiento. Sin embargo, las imágenes de las cámaras cercanas revisadas por un agente de policía israelí confirmaron que las acusaciones de los colonos eran falsas. Esa misma noche, los colonos asaltaron el jardín de infantes.

La vida cotidiana se ha vuelto cada vez más difícil para las personas palestinas, a medida que las fuerzas de ocupación intensifican los esfuerzos para perturbar sus rutinas normales. Un trayecto para llegar al centro de la ciudad de Al Khalil/Hebrón que anteriormente solo tomaba 10 minutos caminando ahora lleva más de 20 minutos en coche, y esto es debido a los innumerables controles de carretera, puestos de control fronterizos y zonas restringidas. Además, los colonos, junto con las personas soldado, han impuesto una directiva unilateral a las personas residentes de ‘Jabal Jalis’, limitando su libertad para salir de sus casas brindándoles una ventana de sólo dos horas al día. Les transgresores, dijeron, se enfrentarán a violentas repercusiones.

En toda Palestina, las autoridades y los colonos israelíes restringen el acceso a servicios fundamentales y, en Jabal Jalis, consideran que incluso el suministro de tanques de oxígeno para las personas ancianas es una amenaza para la seguridad nacional. Además, se prohíbe a les trabajadores municipales entrar en la zona para reparar los servicios eléctricos o para recoger la basura. A medida que se acumula la basura, los colonos han exigido que se deje a escasos metros de las viviendas y de los parques infantiles, enviando el mensaje de que «eres basura y mereces vivir en ella».

En respuesta a la persistente intimidación, acoso y amenazas potencialmente letales de los colonos, las familias palestinas hacen gala de una resistencia y unidad extraordinarias. Han cultivado una cultura de apoyo mutuo y vigilancia, organizando horarios de vigilancia comunales para garantizar una vigilancia constante. Este sistema garantiza que, ante cualquier señal de amenaza, una persona vigía pueda alertar a la comunidad y permitir a sus integrantes buscar refugio. Este enfoque colectivo no sólo subraya su determinación de sobrevivir, sino que también encarna la profunda fuerza de la solidaridad.

Oremos por las familias de ‘Jabal Jalis’, oremos por su fortaleza, esperanza y firmeza ante una ocupación opresiva y violenta. Oremos por la igualdad de derechos para todas las personas y por el fin de la ocupación colonial y de los sistemas de apartheid que controlan todos los aspectos de la vida de las personas palestinas. Oremos por la justicia y por la libertad.

Read More Prayers

Ir al contenido