Desde el 7 de octubre, las familias palestinas de Al Jalil, especialmente las de la H2, viven un infierno adicional debido a los cierres de los puestos de control fronterizo, a las humillaciones en dichos lugares, a los brutales ataques a las personas y a la denegación de entrada a sus hogares. Escuche a una mujer de Tal Rumaida compartir su historia con nosotres.



