
Criminalización contra las personas en tránsito en Grecia continúa
El 19 de mayo se llevó a cabo otro juicio en Kalamata representando los ataques sistemáticos a la libertad de la gente por parte del Estado en Grecia.
El 19 de mayo se llevó a cabo otro juicio en Kalamata representando los ataques sistemáticos a la libertad de la gente por parte del Estado en Grecia.
En un movimiento sin precedentes, las autoridades griegas acusaron a un refugiado de ahogar a su hijo de 6 años durante un naufragio. El 18 de mayo del 2022, él será juzgado en Samos junto con su acompañante, quien se enfrenta a cadena perpetua por pilotar el barco. Setenta organizaciones de toda Europa piden que se retiren los cargos contra #Samos2.
El pasado 05 de mayo, el juicio contra los #Paros3, Kheiraldin, Abdallah y Mohamad, se llevó a cabo en la isla griega de Syros. Tanto el fiscal como les jueces reconocieron que las tres personas defendidas no eran contrabandistas y no habían actuado con ánimo de lucro, ni eran culpables de las 18 vidas que se perdieron. A pesar de esto, los tres padres fueron condenados por “facilitar acceso ilegal”, resultando en una sentencia de 187 años para el “capitán”y 126 años para cada uno de los dos “asistentes”.
Las personas migrantes no solo están sujetas a los peligros de huir cruzando el océano en embarcaciones inseguras, sino que también enfrentan el riesgo de ser empujadas hacia aguas abiertas por las autoridades griegas.
Después de la interrupción de su juicio el 18 de marzo, Amir y Razuli serán absorbidos nuevamente por el sistema penitenciario en un despliegue autoritario de fuerza.
El Ministerio de Migración griego abre las puertas a los y las «refugiados reales», mientras que las personas que vienen de Medio Oriente y África han sido almacenadas y criminalizadas durante años.
El gobierno griego celebra su gestión de la crisis migratoria, dejando a su paso atroces violaciones de derechos humanos.
Nosotres estuvimos al lado de aquelles con quienes tenemos algunos desacuerdos, pero con quienes compartimos la convicción de que no deberían existir “campamentos” porque estos “campamentos” son prisiones. Pero también estuvimos al lado de la oposición, aquelles que están en contra de los “campamentos” porque no soportan a las personas que van a encerrar en éstos.
Oremos por el fin de los crímenes en contra de la humanidad en el Mar Egeo.
Oremos por el fin de la criminalización de la solidaridad.